La Olla es uno de los rincones más hermosos y visitados de La Cumbrecita, especialmente en los días de verano. Se trata de una piscina natural profunda, ubicada al final de un sendero que bordea el arroyo Almbach, enmarcada por un frondoso bosque de coníferas que la convierte en un verdadero paraíso.
Quienes llegan hasta aquí encuentran agua pura de montaña, sombra natural, paz y una belleza que invita a quedarse por horas. Si alguna vez soñaste con nadar en una olla de piedra rodeada de verde y silencio… este es el lugar.
La Olla se encuentra en uno de los extremos del pueblo peatonal de La Cumbrecita, dentro de la Reserva Natural. Es fácilmente accesible a pie desde el centro del pueblo, en una caminata tranquila de unos 20 minutos siguiendo el curso del arroyo.
El camino es sencillo, rodeado de naturaleza y muy bien señalizado.
En La Olla se respira una calma difícil de encontrar en otros balnearios. La ausencia de ruidos urbanos, la presencia del agua cayendo suavemente y el canto de los pájaros componen una atmósfera perfecta para el descanso total.
Este lugar forma parte del concepto de turismo responsable y de bajo impacto que caracteriza a La Cumbrecita: respeto por el entorno, conservación y armonía con la naturaleza.
La zona cuenta con espacios para sentarse, descansar o compartir un almuerzo al aire libre. Aunque la parte central de la pileta es profunda, hay zonas menos hondas a los costados, aptas para niños siempre bajo supervisión.
Es recomendable llevar:
Si querés quedarte cerca, el complejo turístico La Olla ofrece opciones de alojamiento a orillas del río:
Además, el complejo cuenta con parque arbolado, juegos infantiles, mesas, sillas y espacio para contingentes.
La Olla no es solo un balneario: es uno de esos lugares que se graban en la memoria por su belleza simple y pura. Si estás en La Cumbrecita, no podés dejar de caminar hasta este rincón escondido de calma, sombra y agua viva.
Un rincón natural hermoso, entre rocas y bosque, donde el arroyo forma una gran pileta de agua clara con una pequeña cascada. Hay playitas, bancos y mucho verde para relajarse. Ideal para tomar unos mates, disfrutar del paisaje y sacar fotos increíbles. A solo unos minutos del centro de La Cumbrecita y de acceso muy sencillo.